Hoy en la mañana tuve que ir bien abrigadita a la oficina. El tiempo
cambio repentinamente y yo no estaba para nada preparado a esto... Fui a la oficina, y esta se vio aún peor. Un obrero sacó todas las
piezas del suelo. Bueno después de haber envuelto todos las cosas
electrónicas en bolsas de basura fuimos a comer en un restaurante danés. La comida estaba exquisito pero
eeexquisito :P
En casa ya me siento muy acogida. Y aunque pasó
una sola semana me parece como si ya estuviera aquí mucho más tiempo.
Tantos impresiones y tantas vivencias. En este momento tengo que contar
algo que me emocionó mucho. El otro día me llamó Nelly y luego nos
abrazabamos los tres - juan carlos, el papá - nelly, la mamá y yo y me dijeron que estén
muy contentos que esté acá :) Me alegró mucho y yo también estoy feliz
poder ser acogida en esta casa.
Pero si uno quiere vivir acá, tiene
que ser amigo de los animales. En esta casa no sólo se encuentran los
dos perritos, sino también muchas cucarachas. :P
Cuando llegué a casa
un día nos sentabamos todo en la cama para charlar un rato y llegaron
los perritos que ese día estaban más activos que ya son y mientras
saltaron encima de la cama y yo querría salvar las gafas me tiraron al
suelo a mí. Imagínese este imagen, yo tirado al suelo, alzando las gafas
y encima los perros. Nos "cagamos" de risa.
El tren argentino,
que yo tengo que tomar todos los días es el puro contrario al tren
suizo. Aquí la gente viaja con las puertas abiertas y mucha gente se
siente en el escalón y cada 5 minutos llega alguien para vender cosas,
si sean chipás, pan casero, revistas,... Mientras tanto llegan gente
pidiendo dinero, tocando instrumentos o cantando. Uno nunca se aburre en
ese tren. Me da pena por los niños de la calle, pero me
aconsejaron que mejor no saco mi cartera en el tren para buscar
moneditas. Tal vez otro día guardo algunas monedas en el bolso del
pantalón, pero lo que uno nunca sabe, si la gente luego lo usa para
comprar comida, etc....
Justo después de una semana acá en Buenos Aires, empiezan las problemas. Ya tengo ahora la estampa de la "mala niña". :o
Ayer
y anteayer recorrí una gran parte de Buenos Aires y me encantó.
Lamentablemente ayer le dolió la cabeza a Pagna, estudiante finlandesa,
así que la fui a dejar a su casa. Para averiguar en que dirección
tenemos que tomar el bus, buscamos en Google Maps y así se me fue todo el
dinero que tenía cargado en el celu. Después de haberla dejado en su
casa volví al centro y me fui a clases de Tango... sin avisar a mis
padres, ya que ya no me quedaba dinero para llamarlos. Yo sin
preocupación atendía a las clases de tango de las 7 a las 9 de la tarde,
por que esperaba que nadie se va a preocupar. Claro que no, si anda una
chica rubia y extranjera después de una semana estar en Buenos Aires
por los barrios oscuros. Bueno igual llegué bien a casa y después de un
reto y sentimientos culpables ya nos disculpamos y estamos bien de
nuevo. :)
Pero tengo que mencionar que mi primera clase de Tango fue
un éxito, de hecho me encantó. Era un ambiente internacional con mucha
gente jóven y aprendí más o menos rápido :)