El viaje sigue

Corrí todo de pedos desde la oficina hasta la terminal con la mochila puesta para llegar puntual al colectivo. Corrí hasta el final del pasillo para comprarme el pasaje, porque en la mañana cuando fui a la oficina de central de pasajes, ya no estaba ahí, hace 2 meses ya, me dijo un señor, pero yo ni me había enterado.

Al llegar con la cabeza roja al final del pasillo, me dijo el señor, no, tu pasaje tenés que comprar al principio del pasillo.

Corrí todo de vuelta, la hora de la salida del cole ya había pasado, pero me dijeron que aún no salió. Uff, igualmente estaba muy estresada y al ver la fila larga, empecé a preguntar si me dejaran adelantar. Pero no!

Y desde ahí comenzó la espera... Finalmente me entregaron el boleto, bajé a la parada y esperé y esperé... Llegaron Colectivos de la misma empresa pero todos se fueron para otro lado. Entonces seguía esperando pero con la compañía de una chica de Azul.

Después de 1 hora y media finalmente llegó y ahora me encuentro todavía en el viaje hasta Olavarría. Después de un retraso de 3 horas me buscó Martin en la terminal y me dejó en un hotel en donde después de este viaje agotador me caí en un sueño profundo, feliz sobre la linda recepción en la oficina en la mañana después de 3 meses.