Samstag, 10. Januar 2015

Viaje a la Patagonia

Hasta ahora me está yendo todo muy lindo. Pasó una semana y me encuentro ahora en Puerto Madryn tomando sol, escribiendo blog e informes hasta que tengamos la reunión con los voluntarios.

Empezando en Mendoza, que es una ciudad muy linda, la reunión que hizo Peter salió re bien y los voluntarios inicialmente decepcionados por distintas razones quedaron con nuevas pilas.
Al escuchar atentamente me capacité para llevar a cabo estas reuniones en el sur.

En General Roca me sentí muy feliz porque tuve dos reuniones y los dos me salieron muy bien. Me alegré muchísimo porque para mí fue la primera vez. 

Aparte estoy comunicandome con todo el mundo para que se agrande nuestra familia de YFU.
El taxista, la señora en el colectivo y capaz la madrina de un amigo ya se pueden contar pronto a nuestra querida familia YFU.


Chao chao querido Buenos Aires

Recién sequé mi cara de las lágrimas, veo pasando al lado mío los edificios altos de Buenos Aires y me acuerdo del hermoso tiempo que pude vivir ahí. Ahora me encuentro en el colectivo a Mendoza y recuerdo los últimos días en Buenos Aires.

El año nuevo lo empecé espectacular. Junto a Brian y una amiga suiza fuimos con una carpa (ojo, una carpa de juguete, porque la nana de Ana, que supuestamente debería habernos dejado la carpa de tres personas, se equivocó) al Camping Delta, que se encuentra en una isla del Delta. Ahí se llevó a cabo una fiesta, organizado de couchsurfing, para celebrar el Año Nuevo. Nos encontramos ahí con un ambiente intercultural, y bailamos, comimos asado y brindamos para un Año 2015 espectacular junto a nuevos amigos de Belgica, brasil, peru, argentina y suiza.

El siguiente día nos quedamos ahí, disfrutando del silencio y de la tranquilidad de la isla.
Por haber hecho un buen grupo de amigos ahí, quedabamos para juntarnos el siguiente día también. Y se cumplió mi deseo de ir a una milonga.

El sábado tuve una linda despedida de mis amigos en Buenos Aires, pero de verdad no entendí que ya me voy. Además tengo pensado en volver en marzo así que no me la despedida no me puso tan triste.

El último día en la oficina me despidieron con pizza y brownies que hicé la noche anterior.

Ahora espero que me salga lo que me propuse en mi viaje al sur.